26/2/12
13/2/12
De Kimi Ni Todoke para Lili Martinez.
En el Parque de diversiones
Era un sábado en la noche y ya estaba oscuro. Sawako, Ayane y Chizu se encontraban en un Parque de diversiones que habían instalado en la ciudad. Las luces e los juegos alumbraban todo el lugar, los gritos de los niños emocionados se escuchaban por todas partes, al igual que el olor a cabritas.
Las tres esperaban en una fila para subirse a una de las atracciones del lugar.
-¡Falta mucho!-Gritó Chizu apoyándose en el hombro de Sawako.
-Si, y falta mucho-Dijo Sawako asomándose de la fila para ver hacia a delante-, demaciado.
-¡La guata me ruge!-Dijo Chizu dramáticamente.
-¿Y si vamos a buscar algo de comida?-Dijo Ayane uniendose a la conversación.
-Si, que buena idea. Vamos-Las dos empezarona caminar, pero Sawako las detuvo.
-Oigan-Las dos se detuvieron y voltearon a verla-. Si nos vamos perderemos nuestros puestos en la fila.
-Oh, cierto-Dijo Ayene-. Tengo una idea. Quédate aquí y nosotras vamos a comprar, no nos demoramos-. Sawako asintió.
Ya había pasado harto tiempo y no llegaban, Sawako las esperaba y la fila no avanzaba mucho.
-Señores, señoras, niños y niñas-Dijo quien se encargaba del juego-. Lo siento mucho, pero la atracción ha tenido problemas técnicos y no podrá seguir funsionando-. Dijo con voz firme. Todos empezaron a gritarle cosas como: “¡Y para eso gastamos nuestro tiempo! ¡Nunca mas vengo aquuí! Pasé mas de una hora esperando…” y otras cosas más.
Sawako no dijo palabra alguna y como todos se iban, ella tuvo que hacer lo mismo. Decició ir donde estaban Ayane y Chizu. Las buscó y no las encontraba, ya no se encontraban en la tienda de comida y Sawako siguió buscando. Peor llegó a un punto en el que no sabía donde estaba… Se había perdido totalmente. Empezó a caminar si rumbo tratando de pensar donde podrían estar.
-Eso es, las voy a llamar- Dijo Sawako para sus adentros. Metió la mano a su cartera y sacó su celular, lo abrió dispuesta a marcar rápidamente el numero de cualquiera de las dos. Pero tuvo un problema, la bateria de su celular se había agotado. Empezó a caminar con mucho pánico ya que era la primera vez que venía a un Parque de diversiones, y no solo eso, era la primera vez que se perdía y quedaba totalmente sola.
Sawako chocó con alguien debido a que miraba hacia al piso. Alzo la cabeza y se sorprendió.
-¡Kazehaya-kun!-Dijo sorprendida. Lágrimas empezaron a brotar de sus ojos rápidamente y sin pensarlo dos veces se lanzó a Kazehaya dándole un fuerte apretón. Sawako estaba aterrada, pero a la vez totalmente feliz por haber encontrado a su NOVIO.
Kazehaya estaba totalmente sonrojado.
-Que… Que pasa- dijo con la cara como un tomate.
Sawako alzó la vista.
-Me… me perdí y no encuentro a Ayane y Chizu. Y yo… yo estaba muy asustada, nunca me había perdido-dijo entre lágrimas.
Kazehaya cambio totalmente su tono de piel a uno normal y sonrió tiernamente. Se separó de ella y puso sus manos en los hombros de Sawako. Kazehaya había dejado su nerviosismo por el repentino abrazo, porque pudo comprender lo aterrada que se encontraba Sawako, lo podía sentir.
-Tranquila-Los dos se miraban atentamente. Sawako con los ojos totalmente inundados en lágrimas y Kazehaya mostraba total preocupación-. Ahora estas conmigo, ya no estas perdida.¿Te parece que nos vayamos a divertir para subirte de ánimo? No me gusta verte así-. Sawako asintió y sacó un pañuelo de su bolso con el que se empezó a secar las lágrimas.
Los dos iban caminando uno al lado del otro tomados de la mano. Para ellos todo era perfecto y estaban muy nerviosos. Sawako estaba observando a Kazehaya mientras caminaban, pero se sonrojó mucho y decidió apartar la vista. Cuando apartó su vista paró en un stand que de premio tenían a un perrito idéntico a Maru-chan.
-Kazehaya-kun-Dijo Sawako-, mira-Sawako apuntó al perrito y Kazehaya también pudo divisarlo-. ¡Es igual a Maru-chan!
Kazehaya se dirigió al Stand sin decir una palabra. El stand estaba vació, a escepción del que trabajaba ahí.
-Hola, como se juega esto-dijo mientras le pasaba la plata al trabajador.
-Tiene que derribar las latas. Si las derriba todas, se llevará el perro gigante y si no puede, se le dará un premio de consolación-Dijo apuntando a cosas pequeñas de plástico y duces masticables.
-Muy bien- Kazehaya se concentró totalmente y Sawako lo miraba. Pasaron minutos intentando e intentando, el gastaba su plata sin pensarlo.
-Kazehaya-kun, no sigas, gastarás todo tu dinero-. Dijo Sawako tocándole la espalda.
-No puedo, es mi deber de novio darte el peluche que quieres- Dijo en un tono firme. Sawako se sorprendió mucho por lo que dijo. En cinco segundos, mientras pasaba todo esto, Kazehaya tiró la bola y le dio a todos los tarros. Seguramente haber dicho eso le dio valor y fuerza.
-Lo felicito. Se ha ganado el perro gigante-dijo el que atendía el Stand-. Tome-. Le pasó el peluche a Kazehaya.
Kazehaya dio las gracias y se volteó para entregárselo a Sawako.
-Sawako-chan, esto es para ti-dijo sonrojado extendiendo sus brazos con el perro hacia Sawako.
Sawako lo recibió.
-Muchas gracias-dijo encantada, no podía estar mas feliz. Se lo puso bajo un brazo y con la mano libre, tomó la de Kazehaya-. Mientras jugabas, vi un juego que me llamó mucho la atención-. Kazehaya la miró-. Es uno que gira… Como se llamaba…
-¿La Ruleta de la fortuna?-Dijo mirando atentamente a su novia.
-¡Si! Esa.
Los dos ya estaban en Ruleta de la fortuna sentados el uno al otro con un cinturón puesto que los cubría a los dos. La máquina empezó a girar.
Kazehaya notó algo raro en Sawako.
-¿Pasa algo?-Preguntó.
-No… no es nada-dijo entrecortado y aterrada. La ruleta empezó a subir aún mas. La “canasta” donde estaban sentados, se balanceaba y eso la ponía aún mas nerviosa.
-¿Le tienes miedo a las alturas?-Preguntó Kazehaya compresivamente.
La ruleta se detuvo y ellos quedaron en la cima. La “canasta” en la que estaban se balanceaba aún mas.
-¡Eso parece!-Gritó aterrada y se aferró a Kazehaya.
-Tranquila, si llega a pasar algo, yo te protegeré-dijo comprensivamente-. ¿Alguna ves te habías subido a uno de estos juegos?-Preguntó.
-Nunca-dijo sin soltarlo-. Es mi primera vez.
Kazehaya sonrió tiernamente.
-Todo está bien. No te preocupes- Dijo rodeándola con los brazos. El juego empezó a descender.
En el Parque de diversiones
Era un sábado en la noche y ya estaba oscuro. Sawako, Ayane y Chizu se encontraban en un Parque de diversiones que habían instalado en la ciudad. Las luces e los juegos alumbraban todo el lugar, los gritos de los niños emocionados se escuchaban por todas partes, al igual que el olor a cabritas.
Las tres esperaban en una fila para subirse a una de las atracciones del lugar.
-¡Falta mucho!-Gritó Chizu apoyándose en el hombro de Sawako.
-Si, y falta mucho-Dijo Sawako asomándose de la fila para ver hacia a delante-, demaciado.
-¡La guata me ruge!-Dijo Chizu dramáticamente.
-¿Y si vamos a buscar algo de comida?-Dijo Ayane uniendose a la conversación.
-Si, que buena idea. Vamos-Las dos empezarona caminar, pero Sawako las detuvo.
-Oigan-Las dos se detuvieron y voltearon a verla-. Si nos vamos perderemos nuestros puestos en la fila.
-Oh, cierto-Dijo Ayene-. Tengo una idea. Quédate aquí y nosotras vamos a comprar, no nos demoramos-. Sawako asintió.
Ya había pasado harto tiempo y no llegaban, Sawako las esperaba y la fila no avanzaba mucho.
-Señores, señoras, niños y niñas-Dijo quien se encargaba del juego-. Lo siento mucho, pero la atracción ha tenido problemas técnicos y no podrá seguir funsionando-. Dijo con voz firme. Todos empezaron a gritarle cosas como: “¡Y para eso gastamos nuestro tiempo! ¡Nunca mas vengo aquuí! Pasé mas de una hora esperando…” y otras cosas más.
Sawako no dijo palabra alguna y como todos se iban, ella tuvo que hacer lo mismo. Decició ir donde estaban Ayane y Chizu. Las buscó y no las encontraba, ya no se encontraban en la tienda de comida y Sawako siguió buscando. Peor llegó a un punto en el que no sabía donde estaba… Se había perdido totalmente. Empezó a caminar si rumbo tratando de pensar donde podrían estar.
-Eso es, las voy a llamar- Dijo Sawako para sus adentros. Metió la mano a su cartera y sacó su celular, lo abrió dispuesta a marcar rápidamente el numero de cualquiera de las dos. Pero tuvo un problema, la bateria de su celular se había agotado. Empezó a caminar con mucho pánico ya que era la primera vez que venía a un Parque de diversiones, y no solo eso, era la primera vez que se perdía y quedaba totalmente sola.
Sawako chocó con alguien debido a que miraba hacia al piso. Alzo la cabeza y se sorprendió.
-¡Kazehaya-kun!-Dijo sorprendida. Lágrimas empezaron a brotar de sus ojos rápidamente y sin pensarlo dos veces se lanzó a Kazehaya dándole un fuerte apretón. Sawako estaba aterrada, pero a la vez totalmente feliz por haber encontrado a su NOVIO.
Kazehaya estaba totalmente sonrojado.
-Que… Que pasa- dijo con la cara como un tomate.
Sawako alzó la vista.
-Me… me perdí y no encuentro a Ayane y Chizu. Y yo… yo estaba muy asustada, nunca me había perdido-dijo entre lágrimas.
Kazehaya cambio totalmente su tono de piel a uno normal y sonrió tiernamente. Se separó de ella y puso sus manos en los hombros de Sawako. Kazehaya había dejado su nerviosismo por el repentino abrazo, porque pudo comprender lo aterrada que se encontraba Sawako, lo podía sentir.
-Tranquila-Los dos se miraban atentamente. Sawako con los ojos totalmente inundados en lágrimas y Kazehaya mostraba total preocupación-. Ahora estas conmigo, ya no estas perdida.¿Te parece que nos vayamos a divertir para subirte de ánimo? No me gusta verte así-. Sawako asintió y sacó un pañuelo de su bolso con el que se empezó a secar las lágrimas.
Los dos iban caminando uno al lado del otro tomados de la mano. Para ellos todo era perfecto y estaban muy nerviosos. Sawako estaba observando a Kazehaya mientras caminaban, pero se sonrojó mucho y decidió apartar la vista. Cuando apartó su vista paró en un stand que de premio tenían a un perrito idéntico a Maru-chan.
-Kazehaya-kun-Dijo Sawako-, mira-Sawako apuntó al perrito y Kazehaya también pudo divisarlo-. ¡Es igual a Maru-chan!
Kazehaya se dirigió al Stand sin decir una palabra. El stand estaba vació, a escepción del que trabajaba ahí.
-Hola, como se juega esto-dijo mientras le pasaba la plata al trabajador.
-Tiene que derribar las latas. Si las derriba todas, se llevará el perro gigante y si no puede, se le dará un premio de consolación-Dijo apuntando a cosas pequeñas de plástico y duces masticables.
-Muy bien- Kazehaya se concentró totalmente y Sawako lo miraba. Pasaron minutos intentando e intentando, el gastaba su plata sin pensarlo.
-Kazehaya-kun, no sigas, gastarás todo tu dinero-. Dijo Sawako tocándole la espalda.
-No puedo, es mi deber de novio darte el peluche que quieres- Dijo en un tono firme. Sawako se sorprendió mucho por lo que dijo. En cinco segundos, mientras pasaba todo esto, Kazehaya tiró la bola y le dio a todos los tarros. Seguramente haber dicho eso le dio valor y fuerza.
-Lo felicito. Se ha ganado el perro gigante-dijo el que atendía el Stand-. Tome-. Le pasó el peluche a Kazehaya.
Kazehaya dio las gracias y se volteó para entregárselo a Sawako.
-Sawako-chan, esto es para ti-dijo sonrojado extendiendo sus brazos con el perro hacia Sawako.
Sawako lo recibió.
-Muchas gracias-dijo encantada, no podía estar mas feliz. Se lo puso bajo un brazo y con la mano libre, tomó la de Kazehaya-. Mientras jugabas, vi un juego que me llamó mucho la atención-. Kazehaya la miró-. Es uno que gira… Como se llamaba…
-¿La Ruleta de la fortuna?-Dijo mirando atentamente a su novia.
-¡Si! Esa.
Los dos ya estaban en Ruleta de la fortuna sentados el uno al otro con un cinturón puesto que los cubría a los dos. La máquina empezó a girar.
Kazehaya notó algo raro en Sawako.
-¿Pasa algo?-Preguntó.
-No… no es nada-dijo entrecortado y aterrada. La ruleta empezó a subir aún mas. La “canasta” donde estaban sentados, se balanceaba y eso la ponía aún mas nerviosa.
-¿Le tienes miedo a las alturas?-Preguntó Kazehaya compresivamente.
La ruleta se detuvo y ellos quedaron en la cima. La “canasta” en la que estaban se balanceaba aún mas.
-¡Eso parece!-Gritó aterrada y se aferró a Kazehaya.
-Tranquila, si llega a pasar algo, yo te protegeré-dijo comprensivamente-. ¿Alguna ves te habías subido a uno de estos juegos?-Preguntó.
-Nunca-dijo sin soltarlo-. Es mi primera vez.
Kazehaya sonrió tiernamente.
-Todo está bien. No te preocupes- Dijo rodeándola con los brazos. El juego empezó a descender.
3/2/12
Ryu y Chizu: San Valentín
De Kimi Ni Todoke, con mucho cariño, para Caro Herrera.
Ryu y Chizu: San Valentín
Era sábado y Chizu con Ayane se encontraban en el mall comprando un regalo para Ryu de San Valentín. Ya que era hoy y se podía sentir totalmente en el ambiente.
Obviamente Chizu estaba comprando su regalo a último momento, y se lo daría en la fiesta en la que se encontrarían todos.
-Chizu, mejor regálale un peluche, mira, este está muy lindo-Dijo Ayane mirando a través de una vitrina.
-¡Si! Entremos-Dijo Chizu emocionada-. ¡Ah! ¡Son muchos peluches! No sé cuál elegir.
-Mira este, es muy lindo-Dijo Ayane mostrándole un adorable perrito de felpa.
-¿Cuánto cuesta?-Miró la etiqueta que colgaba del peluche- ¡Qué! ¡Es mucho, no puedo pagarlo!-Se dirijo a la señorita que atendía el local-. Señorita, ¿Cuáles son los peluches más baratos que tiene?
-Venga, síganme-las tres se dirigieron a uno de los rincones de la tienda, hay estaban los peluches más baratos, no eran muy lindos y tampoco muchos, pero Chizu encontró uno perfecto para Ryu, un Onigiri con botones como ojos, estaba medio sucio, pero era el presupuesto justo por el que Chizu podía pagar.
-¡Es perfecto! Lo lavo y queda como nuevo. A Ryu le va a encantar, jajajajajaja-Ayane no se opuso al horrible peluche que le quería comprar, ya que era imposible hacerla cambiar de opinión una vez que se decidía, y seguramente Ryu ya estaba acostumbrado a los tacaños regalos de Chizu-. Me lo llevo.
-Okay-dijo la señorita, tomó el peluche y lo llevó a la caja automática.
Chizu se dirigía a la casa de Ryu para entregarle su regalo, ya que quería entregarle el regalo antes de la fiesta, ya que no aguantaba darle su gran y tieno regalo. Chizu ya estaba llegando a la casa, cuando ve a Ryu con ora chica frenta a la puerta de él. Chizu se escondió tras un poste y empezó a escuchar la conversación-“Que bella chica, es hermosa. Seguramente se le está declarando”-. Era una chica de pelo castaño oscuro, ondulado hasta media espalda completamente suelto-. ¡Se le está declarando!... "Seguramente Ryu no tardará en aceptar"-Pensó Chizu más deprimida-, es una chica hermosa-. Chizu sin pensarlo dos veces salió corriendo llena de vergúenza y tristeza.
Llegó a un lugar, frente al mar, el cual era donde siempre iba cuando estaba triste.
“No sé porque haber visto eso me pone tan triste, nunca me había sentido así por Ryu, es algo extraño. Seguramente debe estar saliendo con esa chica tan bonita-Se secó las lágrimas que empezaban a brotar de sus ojos-. Me siento tan avergonzaa, yo como si nada voy a entregale su regalo y por poco interrumpo lo que estaba pasando, tal vez me vió-, las lágrimas empezaron a brotar más rápidamente-. ¡Es horrible! ¿Que me diría Ayane en este momento?.
-Sabes, lo que sientes son celos- pensó Chixu que diría Ayene, pero movió su cabeza de un lado al otro, porque eso lo encontraba totalmente absurdo.
“¡Celos!” Imposible, como voy a sentir celos, prácticamente es mi hermano. Es absurdo.
-¡Son celos!-Le retumbaban las “palabras” de Ayane dentro de su cabeza.
“No sé si quiera ir a esa fiesta, no estoy de ánimo. Prefiero quedarme aquí”.
-- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- -- --
En la fiesta…
-¿Ryu? ¿Sabes ónde está Chizu? Aún no llega- Le preguntó Ayane a Ryu, quien hizo un movimiento con la cabeza en forma negativa.
Ryu se puso a pensar en porqué Chizu no estaba aquí y recordó.
-Ryu-kun, tú mme gustas, por favor acepta esto- Le dijo la chica que se le confesaba. Ryu estaba apunto de responderle cuando escucho un sónido fuerte que venía detrás de un poste que estaba cerca-.¿Ryu-kun? ¿Pasa algo? Te ves distraido.
-No, no es nada-La chica lo miró en espera a que él respondiera lo que ella le había dicho en un principio, y el entendió-. Lo siento, pero me gusta otra persona, no puedo aceptar…
-¡Ya sé!-Exclamó Ryu, cosa que no era muy usual en él. Fue corriendo rápidamente, sin habisarle a ninguno de los que se encontraba en la fiesta. Ryu corría rápidamente, creía saber donde Chizu se encontraría. Fue rápidamente a la casa de chizu, pero no se encontraba, siguió corriendo, ya bajando lavelocidad por lo cansado que estaba, cuando llegó al muelle. Chizu se encontraba ahí, sentada, silenciosa y serena.
-Chizu.
-¡Ah! Cómo me encontraste- Dijo sorprendida y sonrojada.
-Te conozco lo sufieciente para saber que te encontrarías aquí- Chizu no respondió. Ryu se sentó a su lado y empezó a mirar el mar al igual que ella…-. Sabes… le dije que no a esa chica-. Estas palabras sorprendieron mucho a Chizu, per lo disimuló lo más que pudo.
“¡Qué! ¡Le dijo que no! Se que suena egoísta, pero me alegra que la haya rechazado. Aun que era bastante raro, ella era hermosa parecía simpática”.
-¿De qué me hablas?-preguntó Chizu tratando de fingir.
-Se que estuviste ahí, nunca has sido buena espíando o mintiendo.
-Y, ¿Por qué no aceptaste?
-Porque no me gusta ella.
-Pero si era hermosa, su pelo era hermoso y se veeía que era muy simpática y que estaba totalmente enamorada de ti.
-porque me gusta otra perosna Chizu-Dijo Ryu seriamente, al igual que siempre.
-¿Ah? Enserio, no tenía idea- “¿Le gusta otra? ¡¿Por qué?! ¡Por qué no puedo estar yo con él, los dos juntos para siemrpe.”.
-Si-Hubo un silencio largo y tranquilo, los dos miraban el sereno mar que estaba frente a sus ojos. A Chizu no le podían salir mas palabras de la boca, si hablaba la slágrimas que acomuló desd wque Ryu llrgó, se soltarían eufóricamente. Ryu, simplemente no quizo decir nada más. Un hombre d epocas palabras.
Pasados unos minutos…
-Y… ¿Quién te gusta?-Rompió el silencio Chizu con esta pregunta, la cual podría ser muy devastadora para ella.
-Mmm… Me gustas tú, Chizu-Dijo Ryu seriamente. Chizu se sorprendió tanto al oir lo que dijo, que las l´grimas empezaron a brotar rápidamente de sus ojos, sin parar. Estaba en shock, no lo podía creer.
-¿Eee…en serio?-pregutnó Chizu inosentemente. Ryu asintió positibamente-Tu-Chizu se acercó un poco a Ryu-, tu-, se acercó aún mas, estaban frente a frente… tu tambien me gustas-Sus caras ya estaban completamente unidas… en un beso. Chizu sentía las mariposas en su estómago. Todo era perfecto para ella. Se separaron luego de un corto rato.
-Ah, cierto-Dijo Chizu sonrojada-. Aquí está tu regalo-Chizu le entregó la bolsa, mas o menos de un tamaño normal, no muy grande ni muy pequeña. Ryu la recibió sin decir ni una sola palabra. Lo abrió rápidamente y vio el Onigiri y se sorprendió bastante, lo encontró hermoso, pudo fijarse en que seguía siendo uno de los regalos tacaños de Chizu, comprados en donde sea si es que es barato y sonrió ligeramente.

Suscribirse a:
Entradas (Atom)